La cerradura de la puerta es probablemente una de las partes más importantes de su casa, especialmente cuando se trata de la seguridad. Si tienes un cerrojo de seguridad, es importante que sepas cómo ajustarlo si ves que no funciona correctamente.
Consejos de mantenimiento de la cerradura
Si las cerraduras de sus puertas funcionan mal o no funcionan en absoluto, es hora de dedicar un tiempo a su mantenimiento. No es un trabajo difícil y sólo le llevará unos minutos de su tiempo. Aquí tienes algunos consejos que te ayudarán:
- Comprueba si hay suciedad o residuos en el pestillo.
- Asegúrate de que utilizas la llave correcta.
- Compruebe si la cerradura está dañada.
- Asegúrese de que la placa de cierre está intacta.
Cómo ajustar el cerrojo de seguridad
Si el cerrojo se atasca, prueba a ajustar los tornillos de la parte posterior de la cerradura. Tendrás que utilizar un destornillador y girarlos en el sentido de las agujas del reloj o en sentido contrario hasta que estén lo suficientemente apretados como para que no se muevan cuando intentes abrir y cerrar la puerta. Si esto no funciona, podría ser el momento de cambiar los herrajes.
Sustitución de los herrajes rotos
Si el giro de los tornillos no funciona, es posible que haya otros problemas con los herrajes que requieran su sustitución. Por ejemplo, si observa que faltan algunos dientes o están rotos, probablemente se deba al desgaste por el paso del tiempo, o tal vez alguien intentó entrar a la fuerza en su casa en algún momento (y lo estropeó todo). Puedes sustituir estas piezas comprando otras nuevas por Internet o en una ferretería local. Aquí tienes algunos recambios en amazon:
¿Necesitas llamar a un cerrajero?
Quizá sea el momento de que un profesional la revise o la sustituya. Aquí hay algunas cosas que debe saber antes de llamar a un cerrajero:
1. La llave está atascada en la cerradura
Si ha perdido la llave de su casa, no se asuste. Todavía puedes entrar en tu casa quitando la tapa del cilindro y girándolo con unos alicates de punta. Si esto no funciona, prueba a introducir algo plano, como una tarjeta de crédito, entre la puerta y el marco para abrir el pestillo haciendo palanca.
2. Has perdido todas las llaves
Si has perdido todas las llaves y no tienes ninguna de repuesto, no te preocupes: hay otras formas de entrar en tu casa si lo necesitas urgentemente. Por ejemplo, utilizando un dispositivo eléctrico que utiliza el calor generado por la electricidad para fundir el metal o incluso utilizando un soplete (¡con cuidado!).